Maldita perfección...

La música entra por tus oidos, sale por todo tu cuerpo, cada nota te lleva a otro movimiento, sigues la cancion y tu respiracion se vuelve parte de el sonido que impregna el cuarto con piso de madera, levantas la vista y te encuentras otra persona exactamente igual a ti haciendo los mismos movimientos, sigues dejando fluir la musica por tu sangre, por cada una de tus terminaciones nerviosas, un escalofrio recorre tu espalda y al estiras mas.

-Alto!-te indica una persona deteniendo la musica, vaciando tu sangre y dejando sola tu respiración- Mich estirate más, Annie baja los hombres, Valeria la punta.

Automaticamente mis hombros bajan, mi espalda se estira por completo y mi punta sale hacia adelante mostrando el talon hacia enfrente, levanto la mirada, esperando respuesta.

-Mejor- mejor mejor mejor, bien bien bien, mas mas mas, siempre esas son las palabras, un excelente me haría mas feliz, si siempre dice " tiene que ser perfecto, mas arrriba, mas estirada, vamos puedes mas arriba ".

Volteo y me encuentro con el espejo, la persona identica a mi parece cansada, tiene muy marcadas las ojeras, los labios no tienen color a - recuerdo lo que dijo el medico al verme y ver los examenes de sangre "debe tener bajos los niveles de hemoglobina en la sangre"- suspira y se voltea hacia enfrente. La musica empieza a correr y mi cuerpo solo, sin tener que pensarlo empieza a moverse, otra vez con la musica, absorviendo y dando musica al cuarto con piso de madera, escucho cada nota mientras un mechon de pelo cae en mi cara, despego la mano de la barra de madera y me lo paso por detras de la oreja, empiezo a subir sobre mis puntas y sigo con el ejercicio.

Que importa? me empiezo a cuestionar, nunca sera perfecto, aunque pase haciendolo mil años, aunque mi pierna suba hasta mi frente, aunque apoye todo mi peso en las puntas de los dedos, aunque me estire hasta llegar al techo, aunque siga mi mano con la mirada nunca sera perfecto, por que esa palabra no deberia existir, nada es perfecto, pero parece, cuando ves a la persona que tienes enfrente ves como sus movimientos son "perfectos", son fluidos, estirados, a la musica, concretos, fuertes, simplemente perfectos. Pero aun asi la musica se para y mas recomendaciones salen de la boca de la examinadora corrigiendo detalles, imperfecciones inexsistentes para tus ojos.

Y con la mirada todavia perdida en la musica que llena el cuarto con el piso de madera musito muy bajo: maldita perfeccion...